jueves, octubre 23, 2008

El diablo y yo nos entendemos

El diablo y yo nos entendemos
como dos viejos amigos.
A veces se hace mi sombra,
va a todas partes conmigo.
Se me trepa a la nariz y me la muerde
y la quiebra con sus dientes finos.
Cuando estoy en la ventana me dice ¡BRINCA!
detrás del oído.

Aquí en la cama se acuesta
a mis pies como un niño
y me ilumina el insomnio
con luces de artificio.
Nunca se esta quieto.
Anda como un maldito
como un loco, adivinando
cosas que no me digo.

Quien sabe que gotas pone
en mis ojos, que me miro
a veces cara de diablo
cuando estoy distraído.
De vez en cuando me toma
los dedos mientras escribo.

Es raro y simple. Parece
a veces arrepentido.
El pobre no sabe nada de si mismo.
Cuando soy santo me pongo
a murmurarle al oído
y lo mareo y me desquito.
Pero después de todo
somos amigos y tiene
una ternura como un membrillo
y se siente solo el pobrecito.

Jaime Sabines

viernes, febrero 08, 2008

Pequeños Dragones


Mis padres nos educaron para ser independientes, y por que no decirlo totalmente ajenos a las personas, supongo que parte de que yo sea tan arrogante proviene de este hecho.
Mis hermanos y yo crecimos lo mejor que pudimos, tratando de salir lo menos dañado de las complicaciones que te da la vida. Antes de que te puedas dar cuenta ya eres responsable de tu existencia y aunque no hay un manual para no rasparte, sabes ponerte saliva en las heridas, por extraño que parezca mis hermanos y yo tenemos una extraña conexión, a diferencia de muchas otras familias que se demuestran su cariño, nosotros somos mas huraños y apáticos, pero te puedo asegurar que daríamos un riñón y hasta un pedazo de vida si lo necesitáramos para alguno de nosotros.
Reflexiono un poco y me doy cuenta que tengo buenos hermanos, y que a pesar de que nos matamos en batallas bíblicas, siempre terminamos aliados por un bien común, a veces quisiera pedirles disculpas por que en su momento no fui a la altura de sus expectativas, pero ni al caso…
Mi hermana que es muy sincera y abierta, le puedes confiar el mas grande secreto y sabes que estará seguro, mi hermano el rebelde sufrido, que no rompe un plato aunque te esta poniendo una bomba bajo tu cama, tiene la gracia de poder subirte el animo con alguna de sus bromas…
Éramos pequeños dragones dispuestos a conquistar el mundo, jugando a las luchas en la sala, quemando los colchones por que íbamos a hacer una fogata, volando cometas con el ventilador de la recamara, derritiendo chocolates sobre la estufa, apedreando arañas de colores que había en el canal que pasaba por nuestra casa, y mejor aun recolectando chapulines para hacer un ejercito asesino…
Todo eso ya es un recuerdo y ahora parece que de nuevo vuelve el ciclo, hace poco nació mi sobrina, la primera… ver a mi hermano tan feliz de ser papa me hace pensar que no lo hemos hecho tan mal… y sin duda me encantara oír las risas de una pequeña que es parte de mi también pequeña familia…los pequeños dragones quedaron atrás pero parece que ha llegado alguien a poner nuestra vida de cabeza.

viernes, enero 18, 2008

HERMOSAS DECEPCIONES


“Lo sentimos pero no eres lo que estamos buscando” escuche por quinta vez en la semana, “Perdón amigo pero no te podemos ofrecer más” y “Nosotros te hablamos” acompañaban a la primera frase, estar desempleado no es algo horrible pero hace tu vida miserable, vivir al día no es algo que recomiende el doctor, hasta pensé por un rato en tramitar mi pensión de desempleo y vivir del gobierno, pero naaa… vivir a expensas de la gente no va conmigo, es lo malo de tener dignidad o un poquito de orgullo.
Ya se que en este país para conseguir algo se necesitan “palancas”, pero pienso que el esfuerzo propio tiene mas merito, sino al menos puedo limpiar parabrisas o lavar coches.

“Ya entendí que no quieres verme” dice mi mejor amiga, “Extraño las enormes platicas” dice otra amiga, “Pinche Drago apretado, no tuviera falda por que saldrías como cuete” dice mi brother Fer, pero en honor a la verdad, quiero estar solo, no estoy deprimido, ni volviéndome loco, como aseguran mis hermanos… solo me estoy terapeando a mi mismo, convenciéndome de mis imposibles como escuche hace poco.


No quiero pelear con nadie, ni lastimar a nadie, simplemente estoy haciendo recuento de mis pocas victorias y eternos fracasos, y que hay batallas que por mucho que pelees están perdidas, lo gracioso es que me estoy volviendo experto en ellas… se que la vida no es una telenovela y que la estupidez esta de moda, que tendré trabajos horribles, me haré de enemigos jurados, dejare rastros de mi por las calles, seguiré enamorado de mujeres que nunca me harán caso y diré maldiciones a quienes me quieran tomar el pelo, así como el escritor Juan Madrid dijo…”Me podrán robar el sueño, poblar mis pesadillas, pero nunca me quitaran el derecho a gritar mientras me quemo”