miércoles, junio 06, 2007

Pensamientos (1)

Fuerte... siempre he querido serlo, fuerte como nadie...
fuerte, ser fuerte del alma, tan puramente lo deseaba, tan ciegamente lo anhelaba...
pero por màs que lo intento no lo soy, peor aun... nadie lo es.
Aun... aun estoy tratando de entender a mi entorno... pero es dificil...
Camino por la calle solo, y solo veo gente en soledad, sera... que no se saben acompañados?
Por eso me volvere fuerte, no lo confundas con arrogancia, ni autoridad... quiero ver mi tiempo en mis manos, y ocuparlo de la mejor manera...
Quiero ver de nuevo una sonrisa en tu cara, que cuando nos volvamos a ver te rias de mis tonterias, por eso me volvere fuerte para sentir tu calor en mi fregada alma...


Ningún hombre conoce lo malo que es hasta que no ha tratado de esforzarse por ser bueno. Sólo podrás conocer la fuerza de un viento tratando de caminar contra él, no dejándote llevar.

Clive Staples Lewis

Grises dìas...


Cuantos dias han pasado? como si los contara... dìas de rutina, dias de solo cumplir con lo necesario para satisfacer a tus jefes, aburrido, tedioso, rutinario... asi me estoy volviendo, y este sentimiento pesa en mi espalda, me veo en el espejo y me doy lastima, buscando lo rescatable de los escombros de mi vida, como si un sismo me hubiera derrumbado.

Pero no me detengo, o al menos trato de no determe por nadie, buscando ese lugar donde pueda depositar mis anhelos, un lugar sagrado para que mis errores no me coman vivo, busco un refugio con desesperacion, y es lastimero mi proceder pero no lo puedo evitar.

Grises mis dìas, asi se han vuelto no te los platico para no molestarte, seguire buscando, aun si nunca encuentro ese lugar, tendre la pequeña satisfaccion de morir en el camino a mi destino...

Testamento de miércoles

Quiero aclarar que este testamento
no es el corriente colofón de vida
más bien se trata de un legado frágil
vigente sólo hacia el final de un día
digamos pues que lego para el jueves
las inquietudes que me puso el martes
cambiadas sólo un poco por los sueños
y esa tristeza que es inevitable.

Lego una nube de mosquitos y una
computadora que no tiene pilas
y hasta mi soledad con la esperanza
de que mis legatarios no la admitan.

Lego al jueves cuatro remordimientos
la lluvia que contemplo y no me moja
y el helecho ritual que me intimida
con la vieja elegancia de sus hojas.

Lego el crujido azul de mis bisagras
y una tajada de mi sombra leve
no toda porque un hombre sin su sombra
pierde el respeto de la buena gente.

Lego el pescuezo que he lavado como
para un jueves de horca o guillotina
y un talante que ignoro si es recato
o estupidez malsana o alegría.

Lego los arrabales de una idea
un tríptico de espejos que me hiere
el mar allá al alcance de la mano
la hiedra que abanica las paredes.

Y sólo ahora pienso que en mi árbol
en mis brumas sin rostro y en mi vino
me quedan por legar tantas historias
que alguna se me esconde en el olvido.

Así que por si acaso y por las dudas
y para no afligir a quien me herede
las dejo para otro testamento
digamos el del viernes.

Mario Benedetti

Mi autor preferido sin duda...